¿Por qué Telerad creció durante la pandemia?

El año 2020 fue tan atípico como agotador; todas las empresas tuvieron que replantearse –sin certeza alguna– cómo seguir adelante.

Pese al complejo contexto de crisis sanitaria que trajo aparejada la COVID-19, en Telerad pudimos capitalizar nuevos conocimientos y alcanzar nuestros objetivos. ¿Cómo pudimos seguir expandiendo y desarrollándonos en un momento en el que el mundo se retrotraía?

En un año en el que la pandemia dejó en descubierto la imperiosa necesidad de llevar a cabo cambios estructurales y de calidad en materia de salud, también se hizo notar otra demanda que reclamaba ser atendida con urgencia: expandir considerablemente la llegada de la medicina a otras latitudes a través de la tecnología. Y más teniendo en cuenta la imposibilidad de muchas personas de trasladarse o, peor aún, de salir de su casa, producto de los confinamientos obligatorios en las diferentes latitudes.

En ese sentido, la situación epidemiológica de todos los países impulsó notablemente el crecimiento de la telemedicina. En países como Brasil se calculan 1,8 médicos por cada 1000 habitantes con una distribución geográfica desigual, ya que se concentran en los grandes centros urbanos dejando más desprovistos a los municipios de difícil acceso, según datos de la OPS (Organización Panamericana de la Salud).

Desde Telerad, promover la salud sin límites ni fronteras y a cada vez más personas, ocupa un lugar prioritario: por medio de nuestro servicio de diagnóstico por imágenes a distancia, 26.436 pacientes accedieron a hacerse estudios durante la primera mitad de 2020, pertenecientes a 37 ciudades del mundo.

Satisfechos y agradecidos por haber podido responder a esta demanda, también agrandamos el equipo y sumamos un nuevo gerente comercial con el fin de potenciar este significativo crecimiento y, como resultado de todo eso, comenzamos a trabajar con nuevos clientes tanto de Latinoamérica como de España.

Telerad, con certificación exclusiva de calidad

Durante todo el 2020, en Telerad nos renovamos tanto interna como externamente, con un profundo cambio en nuestros procesos: luego de varios años de camino recorrido, nos convertimos en la primera y única empresa de diagnóstico por imágenes a distancia de la Argentina que alcanza la certificación del Sistema de Gestión Certificado de Registro N°9000-9918 correspondiente a la norma ISO 9001.

Todo ello demuestra claramente el norte que nos propusimos: seguir optimizando nuestros servicios para servir a cada vez a más instituciones y centros de salud. Pero, por el otro, nos pusimos como objetivo un cambio de identidad de marca. Por eso renovamos nuestra web, que incluye información destacada para la comunidad, con el fin de cumplir un objetivo vital para la empresa: estar siempre cerca de nuestros clientes y pacientes.

Teleducación: un esfuerzo en momentos clave

De alguna manera, la pandemia alertó a los profesionales de la salud que aún no habían advertido los beneficios de apostar por una formación a distancia, para actualizarse y aprender de manera constante, fundamentalmente en este escenario, donde cada día se presentan nuevos retos. Por tales motivos, en Telerad entendimos que la teleducación en esta industria, también debía contemplar innovaciones.

Con ese objetivo en mente, pudimos mejorar nuestra plataforma educativa Teleducación y, a través de ella, realizamos actividades con la participación de disertantes de Latinoamérica y España; pero también ofrecimos webinars gratuitos que contaron con amplia aceptación. De hecho, los últimos seminarios online que realizamos, del que participaron más de 700 profesionales, pudimos llevarlo a cabo gracias a que obtuvimos una beca educativa de la empresa francesa Guerbet, otro logro que nos llena de felicidad. El broche de oro fue lograr la certificación de la misma norma ISO 9001 de Gestión de la Calidad también en nuestro servicio de Teleducación.

Aunque la pandemia por ahora no tiene fecha de vencimiento, durante 2021 el objetivo es seguir expandiendo nuestro conocimiento técnico y médico en beneficio de la comunidad científica. La necesidad de adoptar nuevas prácticas y tecnologías se ha convertido casi en un deber, lo que obliga a aprender nuevas dinámicas que permitan sumar eficiencia.

El beneficio, al final del día, será cumplir con la meta más importante para cualquier centro de salud: ofrecer una mejor calidad de servicio que llegue cada vez a más personas, más allá de la distancia geográfica.