Los avances en diagnóstico por imágenes nos brindan cada vez más eficiencia y precisión, tanto para los exámenes médicos como para la optimización de los flujos de trabajo. Es el caso, por ejemplo, de la tecnología PET-CT y PET-RM, que no solo se viene implementando en los últimos años con gran intensidad, sino que por ejemplo en Argentina, aparecen los primeros casos de producción nacional.
La Tomografía por Emisión de Positrones (PET) es una técnica no invasiva que mide la actividad metabólica, detecta y analiza el comportamiento de un radio-fármaco en el cuerpo humano. Cuando se une con la tecnología CT o RM, permite que muchos de los estudios que con anterioridad se llevaban a cabo con aparatos diferentes, ahora se encuentran integrados en un mismo dispositivo.
Las aplicaciones diagnósticas más frecuentes de PET son las oncológicas, generalmente ocupan un 85% de las indicaciones, pero también son utilizadas en el estudio de trastornos neurológicos, enfermedades neuro-degenerativas, epilepsia, estudios de viabilidad miocárdica y enfermedad isquémica.
La tecnología híbrida de PET/RM promueve la captura de las imágenes en una sola adquisición y de manera simultánea. No solo se logran obtener imágenes de alta resolución de los órganos como el hígado, la próstata o el cerebro, sino que también brinda información de su actividad celular. Por lo tanto, los médicos pueden ver cambios celulares antes de que puedan verse cambios anatómicos. Con la información mucho más detallada de los tumores es posible personalizar los tratamientos y ejecutar una evaluación más precisa de los resultados.
Por otra parte, los pacientes ganan en comodidad y se reducen los costos ya que, con los métodos anteriores podían presentarse errores en la lectura de las tomas realizadas e incluso el contratiempo de tener que hacer los estudios en centros diferentes.
Como venimos mencionando, con el desarrollo tecnológico de estas maquinarias de medicina nuclear se busca aportar un valor diferencial en áreas tan sensibles como la oncológica.
En este contexto, es importante destacar características tales como:
Rapidez y comodidad para el paciente.
Evaluación integral y personalizada.
Un diagnóstico más preciso.
Una menor radiación.
Posibilidad de uso de trazadores específicos.
Así mismo, se proyecta un uso creciente en áreas como la de cardiología, donde el PET es una técnica de alto rendimiento en, por ejemplo, la patología isquémica coronaria y en la identificación de los “vasos culpables”.
En áreas como la neurología, la PET/RM con trazadores marcadores de proteína Tau Fosforilada, se piensa que podrá aumentar la precisión diagnóstica del Alzheimer. También se estima una incorporación cada vez más importante de PET/RM en la población pediátrica, ya que al eliminar la radiación ionizante se suprimen los posibles efectos estocásticos.
¿Qué sucede con esta nueva tecnología en Argentina? En 2015, Argentina adquirió el primer PET-RMN de América Latina. Este año, ya cuenta con el primer tomógrafo PET desarrollado por especialistas del Grupo de Sistemas Digitales y Robótica del Centro Atómico Ezeiza de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), junto con el Grupo de Inteligencia Artificial y Robótica de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), que opera en el Hospital de Clínicas José de San Martín.
Según destacan en la explicación del proyecto, en su desarrollo se trabajó intensamente en reducir los insumos importados, limitándose estrictamente a ciertos elementos imprescindibles como cristales centelladores, foto-multiplicadores y microchips electrónicos. A su vez, tanto la mecánica como la electrónica se diseñaron en forma modular, para lograr un armado y mantenimiento rápido y económico. Responde a todos los estándares internacionales, pero tiene el beneficio de ser de fácil instalación, no tener cables y transmitir la información de manera inalámbrica.
Cabe resaltar, como lo dijimos en blogs anteriores, que la detección temprana del cáncer es fundamental para la supervivencia.
La tecnología es un factor imprescindible en el desarrollo del diagnóstico por imágenes y la telemedicina. Contar con las mejores marcas y tener un plan de implementación es parte de una gestión efectiva de un centro de diagnóstico.