A medida que avanzan las nuevas tecnologías, las imágenes médicas cumplen un papel cada vez más fundamental en el trabajo interdisciplinario. A su vez, gracias al avance en su creciente calidad y definición, se trata de un ámbito sanitario que ha permitido mejorar notoriamente la atención de los pacientes y la rapidez de los diagnósticos.
En tiempos de pandemia y readaptación de los sistemas de salud, ¿cuál es la importancia de esta disciplina en auge y cómo influyó la telemedicina en su crecimiento?
Mucho ha cambiado desde 1895, cuando Wilhelm Conrad Röentgen (1845-1923) descubrió los rayos X mientras experimentaba con rayos catódicos. La rica historia de las imágenes médicas evolucionó y lo seguirá haciendo a medida que maximiza su eficacia gracias a aliados clave como la inteligencia artificial, la inteligencia aumentada, la realidad virtual y 3D y la medicina nuclear.
Tras pasar de lo analógico a lo digital hace más de 20 años, la radiología y el diagnóstico por imágenes han venido evolucionando y ocupando un rol esencial en medicina. Entre los motivos de ese avance y de la creciente demanda del sector se cuentan:
Los cambios demográficos y el envejecimiento de la población están provocando un aumento significativo de las enfermedades crónicas y, con ello, de los tratamientos necesarios.
Las personas son cada vez más conscientes de su propia salud y más exigentes en la elección del tratamiento. También hay mayor conciencia sobre la importancia de los diagnósticos tempranos.
Un aumento en los avances tecnológicos relacionados con el equipamiento de diagnóstico por imagen, las modalidades de imagen, la modernización en la industria de la salud, junto con las crecientes actividades de investigación y desarrollo en el sector de los dispositivos médicos.
La pandemia de Covid-19 aceleró la aceptación de la atención médica digital, incluida la teleradiología.
Desde hace muchos años, la radiología utiliza sensores de rayos X digitales en lugar de película radiográfica para capturar imágenes, lo que mejora significativamente la eficiencia del tiempo y la capacidad de transferencia de imágenes, al tiempo que reduce la exposición a la radiación.
Creciente adopción de la automatización de los flujos de trabajo y la inteligencia artificial, y eso optimiza el trabajo diario de los radiólogos, así como mejora los diagnósticos.
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Se proyecta que los ingresos en el segmento de dispositivos de diagnóstico por imágenes alcancen en España los USD 963 millones en 2022. Fuente: Statista
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En los comienzos de la pandemia, la telemedicina aceleró su consolidación a medida que los pacientes y los proveedores de salud buscaban formas de acceder y brindar atención médica de manera segura. Y luego del récord que esa modalidad alcanzó en 2020 y 2021, lo cierto es que las personas en todo el mundo afirman que continuarán recurriendo a la telemedicina en el futuro.
En el segmento del diagnóstico por imágenes, la influencia de la telemedicina ha resultado particularmente clave. Las nuevas tecnologías en las que se sustenta la teleradiología mostraron su enorme importancia en estos últimos años, especialmente en la detección y tratamiento de enfermedades como el cáncer.
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Las diversas técnicas avanzaron hasta permitir poder capturar los mínimos detalles de las estructuras anatómicas más pequeñas. En relación con los síntomas y la parte del cuerpo que se quiera examinar, las modalidades más utilizadas son: rayos, tomografías computarizadas, estudios de medicina nuclear, imágenes por resonancia magnética y ecografías.
Todas esas técnicas han protagonizado, a su vez, múltiples avances que permitieron a los profesionales obtener información funcional de los pacientes, en lugar de información meramente anatómica. También los sistemas de visualización y almacenamiento de imágenes médicas (PACS) evolucionaron para mejorar los flujos de trabajo, al integrarse con la tecnología en la nube y la inteligencia artificial.
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Se espera que el mercado mundial de servicios de imágenes de diagnóstico supere los USD 6179 millones para fines de 2026. Fuente: Market Reports World
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Así, el diagnóstico por imágenes a distancia continúa su expansión gracias a las nuevas tecnologías y a las diversas ventajas que ellas implican, como el ahorro de tiempo de desplazamientos a los centros médicos, el aumento de la velocidad en la interpretación de las imágenes, la mayor productividad y la optimización del número de estudios.
El foco está puesto en democratizar el acceso a la salud y ese es el desafío que encara cada día el estratégico sector de las imágenes médicas.
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